Obscure [Privado]

Dhampir

Hacía tan solo un par de días que había conocido a aquella interesante...chica. Ella y yo eramos totalmente diferentes, yo era uno con "colmillos" como ella infantilmente me decía y ella era tan solo una pequeña licantropo recién llegada al pueblo.
Extraño que yo conviviera con alguien así?
Si...lo era y bastante.
También era extraña la manera en la que me comportaba con ella, incluso llegando a ser amable, de alguna forma protector con su persona.
Pero últimamente no había podido hablar tranquilamente, siempre que estábamos juntos de alguna forma u otra eramos interrumpidos, por lo cual decidí citarla en las afueras del pueblo, lejos de la división de castillos.
Me pareció que el lugar indicado era el Faro, siendo este un sitio donde podía ver todo desde arriba, quizás así le enseñaría a no perderse por ahí.

La cite casi al anochecer, acordando que nos veríamos por las rocas que rodeaban el lugar.
Obscure [Privado] Faro1

Como era mi costumbre, llegue antes a la cita, sentándome en una de las rocas y esperando por ella, aunque mi mirada estaba fija en el horizonte, donde las grandes olas golpeaban con violencia las formas rocosas que se veían a lo lejos.

Antriclopos

Ya se encontraba de salida, era casi la hora acordada, mas aun, tuvo que salir unos cuantos minutos antes para llegar a tiempo, no quería hacerle esperar, debido a lo amable que había sido con ella aquel vampiro desde su llegada y lo bien y divertida que se sentía con su compañía, además de que era una oportunidad para conocer un poco mas allá del bosque donde había vivido parte de su vida y mas allá del castillo que compartía con los de su raza. Muy a pesar de las muchas indicaciones de sus "Hermanos" los cuidado que debía tener y todo aquello, poca importancia presto realmente, pues se divertía, le agradaba aquella persona y se mostraba mas que amable con ella y, según ella creía, no tenía motivo alguno para preocuparse por nada mas que llegar a tiempo a la cita. Dio un par de vueltas en falso, buscando el lugar, hasta que en la distancia, dio con una estructura que se levantaba entre pequeñas colinas, los pequeños arbustos y a lo lejos el estruendoso sonido de las olas rompiendo contras las rocas de la costa, lugar al que se encaminaba en esos momentos, viendo a la distancia una figura mas conocida, de detuvo un momento en su andar, recobrando un tanto el aliento y luego de acomodar sus gafas, se encamino hacia allí, tapando suave los ojos ajenos con sus pequeñas manos, dibujando una suave sonrisa sobre sus labios.- Nee, nee...quien soy?...-susurro con una voz delicada, intentando no reír y arruinar la sorpresa.-

Dhampir

De un momento a otro note un peculiar aroma que venía hacia mi nariz, sin duda se trataba de alguien acercándose.
Mire hacia atrás por encima del hombro, notando que el aroma era de ella que se aproximaba a paso veloz pero dudoso en cierta forma ya que no conocía bien el lugar. No quise arruinar su "sorpresa" por lo cual cuando sus pequeñas manos cubrieron mis ojos fingí un respingo de sorpresa, acompañado luego con un murmuro, como sí estuviera pensando. -Déjame pensar... tienes las manos más cálidas que he sentido, al igual que tu dulce voz.- sonreí de costado, llevando mis manos para cubrir las suyas. -Nayu...-susurre al fin, moviendo sus manos desde mis ojos hasta mis labios para besarlas superficialmente, haciendo ese característico choque de temperaturas entre su calidez y mi frialdad.

-Me alegra que hayas aceptado mi invitación, pequeña.- dije soltando sus manos para ponerme de pie, dándome la vuelta y viéndola directo a los ojos. -No tuviste problemas para venir hasta aquí? Me hubiera sentido terriblemente mal si por mi culpa te perdías.- de nuevo estaba ese sentido de protección que tenía con ella, cosa que jamás había sentido antes.
Con cuidado de no pisarla, "salte" la roca en donde estaba, para que no hubiera distancia entre nosotros. -Entonces...estas lista?- extendí mi mano hacia ella, haciendo una leve reverencia como si ella se tratara de una princesa, esperando a que colocara su mano sobre la mía para así poder adentrarnos al faro.

Antriclopos

Se aguanto las ganas de reír hasta escuchar su nombre de labios del contrario, riendo bajo y animada, dejando que sus manos fueran removidas de su sitio y llevadas hasta los frío labios ya conocidos del vampiro, dio apenas un paso atrás para dejarle espació al levantarse al mayor. Sonrió e hizo un gesto suave con su mano, para que no le diera mucha importancia a aquello, se sentía complacida de poder visitar un lugar completamente desconocido para ella con aquel vampiro, un paquete completo, pues no conocía el faro ni tampoco mucho sobre aquellos seres, en cierta manera le fascinaba el poder incursionar en aspectos nuevos, alimentar su curiosidad.- No es nada, como no iba a aceptar, para mi es un placer hacerlo, no conozco mucho, es mas, muchas gracias Die-san...digo, Die, por invitarme.-sonrió con suavidad, rascando luego su nuca ante la otra pregunta, pensando que decirle, tampoco quería que creyera que era una torpe, aunque así lo era cuando se trataba de recordar cosas o andar por lugares desconocidos.-

Bueno...a decir verdad, me perdí un poco, pero aquí estoy, no? eso es lo que importa.-tampoco era buena ni le gustaba mentir cuando no encontraba la necesidad de hacerlo, ya sabía que era una despistada, y sino podría darse cuenta a simple vista que no era una loba común, mas bien una bastante defectuosa, rió por sus propios pensamientos, ese día se encontraba mas animada que de costumbre.- Así que no se sienta mal, ni nada de eso o me pondré triste.-dijo, regañandole apenas con su dedo indice, viendo como saltaba hasta donde se encontraba ella, afirmo con determinación y una gran sonrisa sobre sus labios a su pregunta.- Mas que lista, vamos, vamos!! esto será interesante.-comento, ladeando su rostro observando el alto edificio a sus espaldas.-

Tomo la mano ajena con suavidad, allí otra vez el contraste de sus pieles, se dejo llevar por el camino que el mayor considerara mas apropiado, si le había sido difícil llegar hasta donde se encontraba el vampiro, seguro le costaría un poco recorrer el resto del camino que les separaba del faro.- nee, y esta seguro que se puede entrar, no quisiera que le regañaran.-observo un tanto a su alrededor y acomodo sus lentes.-

Dhampir

Sin evitarlo solté una leve risa por sus últimas palabras, sabiendo que quizás no había ser vivo que se atreviera a "regañarme" como ella decía. -No debes preocuparte por eso linda, y si alguien me regaña...lo mato y ya- dije ligeramente aunque conservando un claro tono sarcástico para que no llegara a asustarse.- Creo que solo tú me has regañado, y lo has hecho de la forma más tierna posible.- la mire de reojo, imitando el movimiento de dedos que ella había hecho antes como especie de reproche.

Por unos instantes nos quedamos en silencio, permitiéndome romper la perilla de la puerta del faro con tan solo un apretón, dejando la puerta totalmente abierta para nosotros. -Vamos- susurre aunque al darme cuenta de lo altas que eran las escaleras no quise correr el riesgo de que fuera a resbalar, realmente no sabía si los de su especie recibían algún daño o si sanaban de inmediato como yo, pero no planeaba aventurarme a averiguarlo, al menos no con ella. Por lo cual sin previo aviso la cargue entre mis brazos, con sus delicadas manos alrededor de mi cuello y su cuerpo sostenido al mio.
A paso veloz y sin detenerme subí las escaleras a brincos, pareciendo que volaba, cosa que por su rostro de sorpresa no había experimentado antes. -Te dije que conmigo aprenderías mil y un cosas.-susurre cerca de su rostro, dejando un beso en su frente antes de llegar al último escalón antes de la cima, permitiéndome bajarla de mis brazos para que se desenvolviera más tranquilamente en la punta del faro. -Aquí estamos.- susurre señalando hacia él frente, colocándome a sus espaldas con mis manos rodeando su cintura, enseñándole la vista de todos los alrededores.

Antriclopos

Soltó una pequeña risa por aquellas palabras que tomo a broma, pero de inmediato tapo sus labios al saber que había sido la única persona que se había atrevido a regañarle, aunque no lo había hecho con malas intenciones y mas bien lo había hecho sin pensarlo, le miro de lado.- Lo siento, tampoco ha sido mi intención...espero que lo anterior haya sido una broma, o me asustare si quiere matarme.-llevo aquella manos que tapaban sus labios y se jaloneo apenas el cabello, observando el camino para no terminar tropezando, notando como mas y mas cerca, la estructura de aquel faro se hacía extremadamente enorme ante sus ojos, detuvo su andar y observo hacia arriba, notando como sus lentes se echaban hacia atrás, chocando con el comiendo del tabique de su nariz, por los que se detuvo a acomodarlos, antes de continuar.-

Miro hacia el interior del lugar, el oscuro camino de las escaleras que se perdían en la primera vuelta de caracol, haciendo imposible terminar de divisar los demás peldaños, iba a avanzar pero sintió como era levantada del suelo, se asusto un tanto e inconscientemente se aferro alrededor del cuello del mayor con sus brazos, observo de reojo el suelo y luego el camino, como rápidamente iban subiendo por los escalones, soltó una pequeña risilla por la briza que se generaba ante el movimiento, además de la nueva experiencia que le presentaba todo aquello.- Es...muy divertido...-afirmo ante sus palabras, mirándole con una sonrisa y cerrando apenas los ojos por el pequeño beso sobre su frente. Ladeo su cabeza una vez sus pies tocaron una vez mas el suelo y observo el paisaje que se presentaba frente a ella desde lo alto de aquella construcción.-

Se ve...genial!!.-comento asombrada, el bosque en la lejanía lograba verse casi en su totalidad, cada detalle que desde tierra le eran imposible darse cuenta, el agua del lago a la distancia, era todo realmente sorprendente. Apoyo sus manos sobre el barandal un tanto sucio y levanto la vista, observando por encima del marco de los lentes, el no tan claro por la falta de sus cristales, rostro del mayor a sus espaldas.- Muchas gracias, Die...otra vez por traerme hasta aquí, además del paseo sobre las escalera.-rió suave, soltando el barandal para estirar sus brazos hacia arriba, desperezarse un tanto sintiendo como se le desacomodaba un tanto la ropa.- Su castillo debe de estar...por allá...o por allá.-señalo hacia un lugar y luego hacia el otro al no estar tan segura.-

Dhampir

La verdad era que no estaba concentrado en la vista, si no en cada movimiento que su pequeño cuerpo hacía, provocando que nuestros cuerpos se rozarán de manera accidental. -No agradezcas linda, realmente disfruto de tu compañía.- mi nariz percibía el cálido aroma de su cabello, olía a...canela...frutas quizás, muy diferente al olor humano que perdía su pureza al pasar de los años.

De nuevo una leve risa salio de mi al ver como apuntaba hacia un lugar totalmente equivocado, pensando que ahí se encontraba el castillo donde vivía. -No, mira, es por allá.- tome su mano para guiarla justo al punto donde se alcanza a ver la construcción del castillo Thanatos, aprovechando también para entrelazar mi mano con la suya. -Y por el otro lado esta el tuyo- hice que girara un poco, mostrandole ahora la rocosa y tan distinta construcción del lugar donde vivía. -Aunque debo de decir que me encanta la idea de que sigas perdiéndote y de que yo te encuentre por mis tierras.- solté sus manos, ahora llevándolas a su cintura, donde comencé a acariciar sus costados con suavidad, hundiendo un poco mis uñas en su piel. -¿Quieres quedarte aquí? o...también podría enseñarte mi castillo si tu quieres...- ladee mi cabeza para besar su delicada mejilla, dándole después una suave mordida en esa zona. -Pero te advierto que vas a tener que estar así de cerca a mi para que nadie se atreva a decirnos nada.- con suavidad la hice girar en mis brazos, dejándola frente a frente a mi, teniendo que agachar mi cabeza para quedar a su altura. -¿Qué dices...vienes conmigo?- susurre una vez más antes de sellar nuestros labios juntos, besándola con la suavidad que sabía que ella disfrutaba, convirtiendo el beso en roces suaves de sus calientes labios con los míos.

Antriclopos

Oh...-comento, mirando hacia donde le indicaba y la muy herrada que se encontraba en las direcciones, definitivamente era una vergüenza para la naturaleza de la cual provenía, es que ni eso lograba hacer, y contar las miles de veces que se había perdido estando tan cerca de los lugares a donde quería ir, realmente debía pedirle clases a su hermano mayor Reno y aprender un poco mas de lo que significaba ser un licántropo, aunque ella solo fuera considerada una cachorra dentro de la manada. Rió suave, observando esta vez hacia donde quedaba el castillo de los suyos.- Pero, estuve muy, muy cerca, verdad?.-afirmo apenas con la cabeza, ladeando su cabeza para observar al mayor con una pequeña risilla por sus ocurrencias.- Aunque, Cynthia-sama me ha dicho que intente tener mucho cuidado, que no todos los...-hizo ese ya característico gesto suyo al referirse a los vampiros.-...eran amables con los licántropos...pero supongo que si me encuentro con usted no tendré de que preocuparme.-sonrió suave.-

Soltó un pequeño respingón al sentir aquellas uñas sobre su cintura, junto con un suave quejido, su cuerpo se crispo y le le atravesó un pequeño cosquilleo por el cuerpo, dejándolo escapar entre sus labios, se sentía como si estuviera junto a un cachorro mas, esos gestos así los asimilaba, la mordida en su mejilla y esa manía de enterrar sus uñas sobre su piel, aunque ella era mas suave al jugar.- Bueno, me gustaría conocer el hogar de Die-san...nee, pero...bueno, ya me dijo que nadie lo regaña.-comento, pensando en las palabras que le hubiera dicho el contrario no hacia muchos minutos atrás, por lo que no debía de preocuparse por esos detalles, bueno al menos eso creía. Sonrió viendo al mayor de frente y ladeo un tanto la cabeza de lado a lado, como tomando la decisión.-

Pero antes de que pudiera responder a su pregunta, sintió aquellos labios fríos haciendo contraste con su boca, entrecerró sus ojos de momento, disfrutando las suaves caricias que provocaba sobre sus suaves labios, correspondiendo de manera tímida, haciéndose un tanto hacia delante para sentir mejor y buscando brindarle un poco de su calor a aquella boca ajena. Se separo luego de unos segundos y abrió sus grande ojos, observando los contrarios.- Hai, vayamos a donde Die quiera ir.-afirmo con la cabeza, sonriendo con tranquilidad.-

Dhampir

Su reacción provoco que una leve risa se escapara de mis labios, no perdiendo ese toque de sorpresa en lo que causaban mis labios en ella. A veces se aventuraba a corresponderlos como en esta ocasión, o a veces simplemente huía con un tenue sonrojo en sus mejillas.
-Perfecto, entonces ven conmigo.- me puse de espaldas a ella, inclinándome en el angulo correcto para que no le fuera muy difícil alcanzar mi espalda. -Anda, súbete, será mucho más fácil así. - espere a que lo hiciera para así sostenerla por los pies, llevándola como si tan solo fuera una liviana bolsa en mi espalda.

De esa manera no tenía que preocuparme por disminuir el ritmo de mis pasos, teniendo la libertad de ir tan rápido como hacía unos minutos, dándole la sensación de que volábamos aunque para mi era de lo más normal ganarle al tiempo de los humano, yendo más rápido que sus ojos.

Descendí con ella por las escaleras, adentrándome después por la playa, caminando hacia el lugar que le había señalado...el Thanatos Castle

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